jueves, 14 de mayo de 2015

Medidas contra el tráfico no permitido y el tráfico irregular con fines fraudulentos en las comunicaciones electrónicas

Con el Real Decreto 381/2015, de 14 de mayo, el Gobierno ha establecido medidas contra el tráfico no permitido y el tráfico irregular con fines fraudulentos en las comunicaciones electrónicas. Todo esto se dicta al amparo de la competencia exclusiva del Estado en materia de telecomunicaciones, reconocida en el artículo 149.1.21.ª de la Constitución.

En el ámbito de los servicios de comunicaciones electrónicas, existen agentes que desarrollan actividades destinadas a obtener un lucro económico indebido. Estas consisten tanto en usos oportunistas de las ofertas comerciales de los operadores, pasando por acciones que conllevan infracciones administrativas, como hasta otras que implican actividades ilícitas. Estas últimas están, tanto relacionadas con los propios servicios de telecomunicaciones como con otros servicios conexos, como la comercialización de contenidos o los terminales y equipamientos de usuario.
Estas actividades pueden adoptar diferentes formas cambiantes, siendo las más habituales las que se aprovechan de la cadena de pagos por servicios o contenidos soportados por redes de telecomunicaciones que implican la concesión de crédito por un operador a un tercero, ya sea otro operador o un usuario final, que con frecuencia resulta impagado.

Así, estas comunicaciones suelen caracterizarse por ser generadas y prolongadas de manera artificial con el fin de obtener un lucro de la cadena de pagos de facturación. Inicialmente estas prácticas se asociaban a servicios de tarificación elevada que ofrecen mayores márgenes de beneficio. Sin embargo, en la actualidad, se extienden a todo tipo de servicios y numeraciones mediante técnicas de generación de llamadas masivas, aumentando el perjuicio económico a los operadores y usuarios y pudiendo llegar a generar problemas de calidad de servicio, e incluso poner en riesgo la seguridad y la integridad de las redes y servicios a causa de la elevada ocupación de recursos provocada.