sábado, 30 de enero de 2016

#putipobres Aporofobia y otros conceptos

En Noviembre de 2008, se inició, en España, una campaña para que la Real Academia de la lengua española integrara en su diccionario la palabra “Aporofobia”, construido a partir de una denominación griega, áporos, que significa pobre, sin salidas o escaso de recursos. Por supuesto, esta venerable institución no lo ha aceptado por no ser suficientemente conocida por toda persona que hable español. Ahora bien, aunque no se haya aceptado el término, el concepto existe ya que “aporofobia” representa el miedo hacia la pobreza o a los pobres. Aunque también puede interpretarse como la repugnancia u hostilidad ante el pobre, el sin recursos o el desamparado.

En Europa, esta situación se produce por la reacción frente a la inmigración o a los refugiados. Ambos colectivos huyen su país de origen. La inmigración es debida a la miseria económica. Los refugiados huyen de una situación de guerra o bien porque ciertas condiciones personales son contrarias a la mayoría de su país intolerante hacia ellos. 

Inmigración
La inmigración representa el coste humano de las desigualdades económicas. Cuando se produce en el interior de un país, del campo a la ciudad, se denomina migración. Cuando cruza frontera, será emigración al referirse a la salida de un país. Luego, inmigración es la entrada de personas en un país. El mito de “venir con papeles” no forma parte más que del imaginario colectivo. Sólo ocurre en ciertos sectores económicos, fuertemente controlados por sindicatos del país de llegada. Tal es el caso de la vendimia en Francia. Allí, está muy estructurada hacia las empresas contratantes. Además, la inmigración laboral se regula por leyes nacionales, pactadas entre sindicatos de trabajadores y asociaciones de empresarios.

Refugiados
Los refugiados, por su parte, no disponen más que de un marco legal reguladas por normas internacionales, azarosamente traspuestas en los ordenamientos nacionales. De hecho, en Alemania, un 40% de los alemanes pide la dimisión de su canciller Angela Merkel por la llegada masiva de refugiados. La  empresa Focus  entrevistó a 2.047 alemanes entre el 22 y el 25 de enero, de los que el 45% de los encuestados no consideraban que debía dimitir; y un 15% no supo qué responder. La encuesta se publicó justo después de que el Gobierno de coalición de democristianos y socialdemócratas aprobara primero una norma para expulsar de Alemania a los extranjeros que cometan delitos graves y muy graves, y luego unas nuevas que endurecen la política de asilo y que facilita la expulsión de inmigrantes procedentes de Marruecos, Túnez y Argelia, al considerarlos países seguros. Una vez más, se separan los conceptos de emigración económica y refugiados políticos.
De esta “repugnancia” hacia la pobreza, subyacen varios sentimientos, entre ellos, el nacionalismo y la discriminación sexual.

Nacionalismo
El nacionalismo tiene un lenguaje cuanto menos ambiguo en el terreno de la inmigración, con una posición próxima a la xenofobia. «Primero, los de casa», lema de todo nacionalista, implica debilitar la democracia, alentar el populismo o pretender usar categorías antijurídicas para garantizar un diferente acceso a los servicios públicos. Por suerte, no puede existir en un Estado de derecho.
En España, la crisis económica ha exacerbado el nacionalismo catalán. Su supremacismo está incrustado en las entidades separatistas cuando no el odio hispanófobo de determinadas personas representativas del nacionalismo catalán. Para muestra, un botón. En marzo de 2008, la esposa del ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol criticó las raíces andaluzas de José Montilla, entonces Presidente de la Generalitat. Marta Ferrrusola indicó que le molestaba "mucho" que el presidente de la Generalitat fuera "un andaluz que tiene el nombre en castellano", en referencia a José Montilla, nacido en Iznájar (Córdoba). También desaprobaba su falta de fluidez al hablar catalán. En el fondo, subyace el tópico de lo andaluz, que me niego a reproducir por falso e injusto.

Salvando personalidades individuales, de compleja trayectoria política, capítulo aparte merece la secesionista Associació de Municipis per la Independència (AMI) que refleja una mentalidad supremacista («el alma del pueblo catalán siempre en vanguardia en trabajo, artes, ciencia y pensamiento», rezan sus estatutos) e hispanófoba (no existe otra España que la inquisitorial y agresiva de Felipe V, Primo de Rivera y Franco).  Para todo nacionalista, las personas no tienen más valor que agrupadas en pueblo que es quien detenta las cualidades. Será que la Constitución Española de 1978 no reconoce la libertad, igualdad, justicia y pluralismo político.

Discriminación sexual
Otra gran prueba de la crisis económica tiene su reflejo en la libertad sexual. Cynthia Solís Arredondo, fundadora de Lex Informática Abogados, despacho mexicano especializado en asesoría sobre delitos electrónicos, lo expresó muy bien. ¿Qué opinan de una chica con minifalda y escote en una colonia pobre y de otra que usa la misma ropa, pero de marca y en una colonia rica? Una es prostituta y la otra es sexy”. Dicho de otra forma, por el hecho de tener pocos recursos económicos, su futuro podría ser la prostitución. El colmo de la liberación sexual de la mujer implicaría que, al ser pobre, se está disponible sexualmente para cualquiera. Es un asunto histórico en el que se cruzan supuestas jerarquías de raza, origen étnico, de clase social y género.

Redes sociales
La raíz no está en las redes sociales, éstas sólo han puesto una lupa a la discriminación. Si bien empezó en México, se ha extendido por todo Suramérica. Esta tendencia en Internet ha sido denominada “pobrezafilia”, la cual “discrimina, ataca la dignidad de las mujeres, las ve como objetos y relaciona su clase social con que están disponibles para cualquier hombre”
No es mi intención resaltar el morbo de imágenes en redes sociales con la etiqueta #Putipobres, con la que emergen otras tantas de mujeres desnudas o semidesnudas siempre en lugares que exhiban la pobreza de sus protagonistas. Aunque se hable del género femenino, también se aplica al sexo masculino. A menudo, las imágenes surgen en el ámbito privado y la pareja la hace pública. Luego, aparecen los "cazadores": usuarios que rastrean la red en busca de fotos robadas o filtradas para luego difundirlas, principalmente a través de Twitter y con hashtags como #Pobrezafilia, #putipobres, #misseria, #TanRicaYTanPobre, #LegalicenAlasDe16, #YaQuierenDesdeLos15. Al final, acaban en un enorme escaparate de morbo y humillación muchas veces sin saberlo y sin que nadie se preocupe siquiera por ocultar sus caras.

Otros actores
De una parte, los difusores de fotografías escondidos bajo el  anonimato de cuentas con seudónimos y fotografías falsas. De otra parte, se encuentran las empresas que administran estas redes sociales. Tienen una respuesta muy lenta para retirar ese contenido. Aunque pretendan defenderse frente a un intento de censura, no es el caso ya que se está afectando la dignidad de las personas. Además, las imágenes de menores de edad desnudas se consideran pornografía infantil. En España, el Código Penal ha sido recientemente reformado para sancionar esas conductas. No bastaba con políticas de prevención.

Soluciones

La respuesta no es fácil. Cindy Flores, editora de la sección Libido de la web Reversos.mx, dio algunas claves: "Es una pregunta muy difícil de responder. Es muy complejo el tema, pero quizá si se promoviera un mayor respeto y menos prejuicios, un cambio social, este tipo de expresiones podrían disminuir. Pero no podemos dejar de lado esa parte oscura del ser humano, esa que nos disgusta reconocer y que, sin embargo, nos demuestra una y otra vez que no somos tan dueños de nuestra psique como nos gustaría creer".

viernes, 1 de enero de 2016

Nuevo rumbo

Inicie este blog en noviembre de 2010. Por aquel entonces, la crisis económica occidental no había mostrado toda su agresividad. En EEUU, ya habría quebrado el banco LehmanBrothers. Sin embargo, los efectos nocivos de todo aquello aún no habían llegado a nuestro país. Esa era la versión oficial. Después, vino la reformaconstitucional del artículo 135. Para unos, ese es el detonante. Para otros, es la solución. Como siempre, aparecen los economistas de diversos signos para explicar, a todo toro pasado, el porqué de las cosas.

Sin embargo, para quien escribe, lo duro es algo mucho más cercano. Puede que esté relacionado pero prefiero creer que no. La enfermedad muy grave de un familiar cercano no puede justificarse. Sólo toca apoyar los tratamientos médicos del enfermo, con caríño y paciencia. Cariño, porque quien sufre, debe recibirlo sin cicatería de entrega. Paciencia, porque corresponde creer en el nuevo Dios, llamado servicios médicos.

Por todo, me encuentro limitado en movimientos, conectado al mundo “casi real” a través de las redes sociales. He ahí que he leído bastante más que en mi época de estudiante y estudioso del Derecho, todo ello junto.

Sin ánimo de presumir, puedo leer en varios idiomas. Ahora bien, no manejo el árabe, el indonesio o el urdú, por ejemplo. Sin embargo, los traductores asociados a las diferentes plataformas ofrecen unas traducciones, unas veces correctas y otras sospechosas.

Estas lecturas se derivan de unas quejas a nuestro Defensor del Pueblo, que tuve que presentar en nombre de SOS RACISMO MADRID. Tratan de la vulneración de derechos fundamentales y libertades públicas incurridas por la Real Federación Españolade Fútbol.

De aquella fase de búsqueda, encontré todo un elenco de nuevos temas que me propongan poner en conocimiento de los lectores. Ya no trataré sólo de Derecho Administrativo Local, sino también ahora abordaré aspectos concretos del Derecho Penal (Delitos TIC, Racismo, Pornografía, Trabajo infantil).

Espero que les sea útil.